lunes, diciembre 20, 2004

como en hollywood

me mezclo entre la gente y llego al salón principal que está muy oscuro y repleto de gente que transpira sin saberlo. atravieso toda el área por su lado más angosto para gestionar un daikiri de frutillas pero, como demora mucho, me llevo el de ananá. la gente se fayutea en forma sistemática y yo tengo pegadas dos o tres personas del brazo, una suerte de fans - ex compañeros de trabajo que me atomizan cada vez que me encuentran diciéndome lo buena que era y todo lo que me recuerdan - así que intento desprenderme de ellos y en lo posible caer en los brazos de algún enemigo o alguna mina bruja, alguien que me represente un desafío. por suerte me encuentro con el mero club de las minas mala onda. ellas están ahi, con las miradas perdidas en el vacío, comiendo chichle, todas vestidas iguales y odiando a las otras minas que son sus amigas y lucen igual ( bah, como son TAAAN amigas se compran la misma ropa, se arreglan juntas para salir y después se detestan porque están iguales ). hay alguien que insiste en cantar, es una linda chica pero suena como una perra que recién pisó un clavo grande, quizás la sacaron de un casting pero hubiera sido mejor que hiciera play back, aunque fuera de " caminito " by Julio Iglesias. todos están esperando la comida pero no hay ningún gesto que anuncie la inminencia de un catering, recorro otra vez cien metros y consigo una coca-cola. entonces vuelvo a recorrer la masa transpirante en la oscuridad, nadie baila, todos parecen estar sólo para ver quien llega pero no hay ninguna celebridad para que podamos criticar, ni siquiera una figurita de la tele...ah no...ahi viene aldo silva .... me saluda...ahhhhhh...misión cumplida.