martes, agosto 09, 2005

sportman

atravesaba una noche helada, por el medio . traía en la cabeza un encuentro casual con un joven amante que estaba prendado por su capa verde. sonreía y pensaba le gusta más la capa que yo. se lo imaginó desnudo y chiquito, frente al espejo, cubierto con su linda capa verde. reparó después, en la breve conversación que habían mantenido en ese encuentro casual. él le había recriminado amablemente que no lo llamaba, ni lo visitaba en su trabajo como antes. ella había admitido su falta. en fin, no se sentía obligada pero era simpático fingirse comprometida. dialéctica pura. solamente eso. la tensión estaría puesta en la capa verde. hay cosas irreversibles, pero no era el caso de la capa que tenia un lado de paño liso y otro, igualmente hermoso, de cuadros escoceses. nada esta perdido, nada es para siempre. así se fue acercando hasta la vidriera de un antiguo bar cerrado donde tres mozos, de calzoncillos de sarga color piel, trapeaban el piso con sendos lampazos.