lunes, marzo 21, 2005

cordoncito mio

no fue buena idea cambiar de taxista. no enumeró las ventajas del que siempre la transportaba pero lo extrañó. el nuevo se creía en las 24 horas de le mans y corría como un loco cazando semáforos en amarilla por una avenida totalmente desierta. la dejó en la esquina, porque le gustaba caminar los últimos metros hasta la puerta de su casa. cuando iba acercándose a la portería se dio cuenta que el portero no estaba y recordó que había dejado la llave de abajo en otro bolso. calculó que estaría durante la hora de descanso del portero. después se largó a especular otras opciones de desaparición del funcionario : un cólico imparable producido por un virus amazónico o una cita con la señora del 201 que insiste en bajarle milanesas en un tuperware, siempre con las peores intenciones. tratando de obtener un soplo de paciencia se asomó a la vereda y divisó a tres adolescentes que estaban en el cordón, junto al kiosco, en la oscuridad. ¿ tiene fuego señora ? le dijo uno. caminó hacia ellos haciendo la farsa de que buscaba un encendedor. ahí vio el porro y decidió que ella también quería fumarlo por lo que propuso: si te consigo fuego me convidas y enfiló a la avenida, entró en el ciber café 24 horas y compró un mini encendedor. ellos estaban en el mismo lugar cuando volvió y pasó el instrumento, le preguntaron si se lo había pedido prestado a alguien y les dijo que si, que era del vigilante de la mediaría. prendieron el porro y le tocó fumar casi enseguida. no fue una performance maravillosa pero logró pasarlo sin toserle el humo en la cara al pibe que tenia a su lado. quedaron un rato en silencio, pasando el super porro gigante sin mucho que decir. ensayó en la mente un par de frases casuales pero las descartó porque sonarían persecutorias. ¿ son del barrio? o... me parece que a vos te conozco ..o tu abuela no es amanda, la del 1005 ?...y dijo solamente esta buena. y se cortó un poco. el tiempo fue pasando entre ratos de silencio y risa, salió otro porro y después otro mas chiquito, una tuca - dijeron. hasta se dio el lujo de carraspear un poco, a veces de soltar el humo antes de tiempo. sus acompañantes no estaban para detectar detalles. cuando vio que la silueta del portero se dibujó sobre la vereda, como una sombra acusadora. se levantó, les dijo hasta mañana y se fue a dormir.

2 comentarios:

Vanessa Alanís dijo...

Te informamos que este blog ha sido aceptado en el directorio de blogueratura.com, el lugar de la literatura independiente.
Encontrarás los botones de enlace en http://www.blogueratura.com/Botones.htm
no olvides colocar uno en el blog para que tus lectores conozcan el proyecto.
Gracias por seguir publicando la palabra.

pd: si aceptas consejos, cambiaría el tamaño de la letra y el color de la sidebar. cuesta trabajo leer el blog

Rebecca Milans dijo...

gracias, seguire tu consejo. la letra grande ya la habia solicitado ft y si bien hice el cambio deberia haber sido un poco mas generosa. a veces no me doy cuenta porque veo " demasiado " bien.